Donación Raquel M. Cáceres.
La iglesia es plenamente mundo y, por eso, está sometida a todas las debilidades y sufrimientos del mundo. Por amor al hombre real, debe quedarse con frecuencia sin techo y renunciar a todo privilegio, excepto a la palabra de Cristo y al perdón de los pecados. Solo así la iglesia se hace libre y pierde el respeto a todos los santuarios y poderosos del mundo. Esencia de la iglesia. Venga a nosotros tu reino. Libro de oración de la Biblia.