Donación Obispo Federico Pagura
La Iglesia en América, llena de gozo por la fe recibida y dando gracias a Cristo por este inmenso don, ha celebrado hace poco el quinto centenario del comienzo de la predicación del Evangelio en sus tierras. Esta conmemoración ayudó a los católicos americanos a ser más conscientes del deseo de Cristo de encontrarse con los habitantes del llamado Nuevo Mundo para incorporarlos a su Iglesia y hacerse presente de este modo en la historia del Continente. La evangelización de América no es solo un don del Señor, sino también fuente de nuevas responsabilidades. Gracias a la acción de los evangelizadores a lo largo y ancho de todo el Continente han nacido de la Iglesia y del Espíritu innumerables hijos. En sus corazones, tanto en el pasado como en el presente, continúan resonando las palabras del Apóstol: "Predicar el Evangelio no es para mí ningún motivo de gloria; es más bien un deber que me incumbe. Y ¡ay de mí si no predicara el Evangelio!". Este deber se funda en el mandato del Señor resucitado a los Apóstoles antes de su Ascensión al cielo: "Proclamad la Buena Nueva a toda la creación". Encuentro con Jesucristo vivo. Encuentro con Jesucristo en el hoy de América. Camino de conversión. Camino para la comunión. Camino para la solidaridad. Misión de la Iglesia hoy en América: la nueva evangelización.